Un famoso crápula, viejo referente de episodios pasados que marcaron magistralmente nuestra oscura memoria, ha retornado con irrevocable petulancia. Descompostura y licencia hacen de él un personaje, aunque resbaladizo, sin duda, rastrero y sabio. Nos corresponde aquí un doble propósito: primero, hacer de su retorno un noble motivo de algarabía, un motivo de hilvanadas admiraciones…y segundo, una manifestación profunda de riesgosas aventuras venideras; de lascivias desenfrenadas y descarnadas revelaciones de sus desquiciados interiores. Pedimos, sin embargo, al público en general mucha parsimonia, abundantes semblanzas de sabios atributos volcarán sus contenidos indescifrablemente astutos sobre erizadas conciencias…
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario